Se llama acento disolvente o de ruptura. Es el acento que separa la unión de dos o más vocales en distintas sílabas, tanto en la escritura como en la pronunciación. Esta separación se produce cuando la vocal cerrada gana en golpe de voz a la vocal o vocales abiertas; por lo tanto, debe colocarse el acento separativo, sobre la vocal cerrada, y cada vocal corresponde a diferentes sílabas.
Por ejemplo, en la palabra ‘día’ la vocal cerrada ‘í’ gana en golpe de voz a la vocal abierta ‘a’; por lo tanto, debe separarse así: dí-a. La tilde marcada sobre la ‘í’ se llama acento separativo porque separa en dos sílabas dichas vocales.
Ejemplos:
- Ío: resfrío, tío, vacío, envío.
- Íe: ríe, sonríe.
- úa: acentúa, efectúa, continúa.
- úo: actúo, dúo.
De forma similar, en la palabra ‘caía’ tenemos una concurrencia de tres vocales ‘a + í + a’ que si la separamos en sílabas tendríamos: ‘ca-í-a’. Esto se debe a que la vocal débil ‘í’ concentra la mayor fuerza de articulación, en relación a las vocales fuertes: ‘a + a’. En consecuencia, la vocal ‘í’ está marcada por el acento separativo.
- ía: energía, fantasía, manía, alegría.